El escándalo estalla en la empresa Sagalés, el renombrado proveedor de servicios de transporte en Barcelona, cuando una imagen viral sacude las redes sociales. En la fotografía, tomada por un pasajero desconcertado, se muestra claramente a un conductor de autobús, en plena ruta, absorto en su teléfono móvil mientras el vehículo está en movimiento. La atención del conductor está completamente comprometida por un partido de fútbol, sosteniendo el dispositivo con destreza para no perderse ni un segundo de la acción.
La seguridad de los pasajeros y la responsabilidad del conductor se ven comprometidas en este sorprendente incidente, generando una ola de críticas y preocupaciones sobre los protocolos de seguridad de la compañía. Horas más tarde se ha hecho eco de la situación la propia empresa y seguro ha tomado medidas contra el conductor.