Inés Hernand, la carismática presentadora madrileña, ha emergido gradualmente como la nueva cara de numerosos programas televisivos, cautivando al público con su actitud fresca y referencias a las aficiones contemporáneas de la juventud. Se consagró como imagen oficial de RTVE durante la primera edición del Benidorm Fest y, actualmente, comparte el escenario de las entrevistas con la icónica Mercedes Milá, formando un dúo memorable. A pesar de recibir elogios en su trayectoria, la subjetividad de Inés al expresar sus opiniones ha generado opiniones divididas.
Durante la gala de los premios Goya, un evento imperdible para los amantes del cine español, Inés Hernand deslumbra en la alfombra roja, siendo una figura clave en el calentamiento previo a la ceremonia. Su estilo carismático y espontáneo la convierte en el centro de atención, conquistando las redes cada vez que aparece en escena. Sin embargo, su enfoque directo y, en ocasiones, controversial, ha desatado críticas.
El momento álgido de la controversia surgió al final del directo, cuando Inés Hernand cometió algunos errores y justificó su desliz con el argumento de haber estado en directo durante cinco horas. Las críticas se intensificaron al considerar que su interacción con Sigourney Weaver careció de profesionalismo, al sugerirle probar el vino de Valladolid. La efusividad desbordante hacia Pedro Sánchez, donde abandonó su objetividad al elogiarlo con un "¡Eras un icono, presi, te queremos!", también generó reacciones encontradas.
Aunque Inés Hernand ha sido elogiada por su frescura y autenticidad, las críticas apuntan hacia su subjetividad y momentos polémicos, lo que ha desatado debates sobre su papel como representante de la generación actual en la televisión española.
