En una iniciativa festiva, el Ayuntamiento de Madrid ha decidido enviar videos personalizados a los niños del distrito de Chamartín, donde el personaje de Baltasar, parte fundamental de la celebración de la llegada de los Reyes Magos, ha generado cierta controversia. Aunque inicialmente se había planificado contar con actores que representaran a Baltasar, se ha recurrido con uno pintado de negro para una experiencia lamentable y racista, el Consistorio ha enfrentado desafíos logísticos debido a la falta de disponibilidad de dichos intérpretes. Ante esta situación, el Ayuntamiento se ha visto en la necesidad de improvisar y ha recurrido a un actor que no presenta la caracterización tradicional de Baltasar. Aunque posee la pigmentación específica, desde la administración municipal se asegura que la intención principal es preservar la magia y la alegría de la festividad para los más pequeños, adaptándose a las circunstancias imprevistas. Esta decisión ha generado discusiones sobre la representación cultural y la importancia de mantener la autenticidad en eventos tradicionales. El Ayuntamiento se encuentra trabajando para garantizar que, a pesar de las limitaciones, la experiencia siga siendo positiva y memorable para los niños de Chamartín durante esta temporada festiva.