Juan Bravo, representante del Partido Popular, ha generado controversia con sus declaraciones sobre el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Al afirmar que "el principal esfuerzo lo hacen las rentas medias y bajas, es decir, aquellos que ganan hasta 30 y 60 mil euros", ha suscitado la indignación de la opinión pública. Muchos críticos señalan que esta afirmación sugiere erróneamente que aquellos que perciben entre 30,000 y 60,000 euros son considerados como clase media, generando descontento entre quienes consideran que esta cifra no refleja con precisión la realidad económica. La declaración de Bravo ha sido percibida como un intento de maquillar la realidad económica, ya que muchos argumentan que aquellos que ganan en este rango salarial no deberían ser clasificados como clase media, sino más bien como parte de la clase trabajadora. La polémica se ha intensificado al cuestionar la precisión de la definición de clase media utilizada por el político, lo que ha llevado a un debate acalorado sobre la equidad fiscal y la representación precisa de los estratos socioeconómicos en la discusión política.