En cada episodio, dos concursantes se enfrentan en una batalla estratégica, alternando entre desafíos numéricos y de letras para acumular puntos y, finalmente, llevarse a casa el codiciado bote acumulado. La tensión aumenta con cada ronda, ya que el turno inicial lo determina el nuevo concursante, mientras que el campeón del programa anterior espera para tomar el relevo y asegurar su posición.