Morad, el talentoso rapero de ascendencia marroquí que ha dejado una huella significativa en la escena musical española, se distingue no solo por su habilidad lírica excepcional, sino también por su postura franca y comprometida con cuestiones sociales y políticas. En una declaración reveladora, Morad compartió abiertamente su perspectiva sobre la fiscalidad, señalando que destina un considerable 47% de sus ingresos en impuestos, contribuyendo así al sistema español en lugar de su país natal, Marruecos.
Con una crítica mordaz, Morad expresó su frustración al comparar su propia honestidad financiera con la percepción de algunos políticos corruptos, sugiriendo que, a pesar de su contribución, a veces se le percibe como "más malo" que aquellos que participan en prácticas cuestionables. Este comentario no solo resalta la complejidad de las realidades fiscales y sociales, sino también la conciencia y valentía de Morad al abordar temas sensibles a través de su arte.