El regreso de Ramón García a TVE como presentador de El Grand Prix ha generado diversas opiniones entre el público y la crítica. A sus 61 años, el mítico presentador vuelve al escenario televisivo acompañado de dos jóvenes co-presentadoras, lo que ha dado lugar a una polémica en torno a la elección del elenco.
Algunas voces argumentan que, de tratarse de una presentadora de 61 años, lo más probable es que hubieran optado por seleccionar a una chica joven como presentadora, pero como es un hombre queda bien poner a un abuelete acompañado de dos jóvenes. Esta opinión se fundamenta en la percepción de que la industria televisiva suele favorecer a figuras femeninas más jóvenes en puestos de relevancia, dejando de lado a profesionales con mayor experiencia en el sector.
Por otro lado, existen quienes defienden la elección de Ramón García como presentador, resaltando su trayectoria y experiencia en el medio, así como su capacidad para conectar con el público. Consideran que la edad no debería ser un factor determinante a la hora de seleccionar a los presentadores, sino más bien el talento y la capacidad de desempeño.