5. Belle Époque, Fernando Trueba, 1992
Este es un claro ejemplo de cómo un buen reparto puede elevar cualquier película. Este film narra la historia de un soldado español que huye tras desertar del ejército y se refugia en la finca de un pintor. Una vez allí, el desertor se hace amigo del artista y convive con él y con sus cuatro hijas.
Las dudas amorosas del protagonista y sus tramas sexuales con las diferentes hijas del propietario del terreno convierten la pieza en una comedia rápida y divertida en la que destacan los diálogos y el guion.
Es un gran acierto apostar por obras corales, sobre todo cuando el elenco lo forman actores y actrices de la talla de Fernando Fernán Gómez, Penélope cruz, Maribel Verdú, Ariadna Gil, Jorge Sanz, etc.