Nunca, nunca, nunca hay que darle la espalda a tu oponente. Si no, que se lo digan a Marinko Matosevic, que perdió un punto contra Roger Federer en uno de sus enfrentamientos en 2014 precisamente por eso, aunque siendo Matosevic uno de los tenistas más peculiares del circuito nos podíamos esperar algo así. En uno de los puntos, Roger Federer corría hacia la línea de fondo después de un globo de Marinko que, inexplicamente, hace un gesto con la mano y se da la vuelta, como no queriendo saber nada más. Federer, que no veía a su rival, golpeó una Gran Willy y le dio en la espalda al australiano, que ni se giró, consiguiendo el punto.